El precio de seguir las tendencias.

El precio de seguir las tendencias.

Las olas de la cultura popular que están en tendencia han estado surgiendo y cayendo con super rapidez, la internet ha hecho más fácil que las personas compartan y, en consecuencia, sigan las mismas cosas, pensamientos, productos, y todo al mismo tiempo. 

Esto genera una sensación inminente de precipitación, el ciclo es demasiado rápido, antes de que algo pierda completamente su popularidad, ya surge la próxima gran novedad, esperando a un público impresionable para orientar el mercado, sin embargo, esto está muy centrado en el producto, ¿Qué sucede con la expresión personal y su gran papel en la construcción de uno mismo mientras, al mismo tiempo, se recopilan pequeñas piezas del exterior para combinarlas con lo que ya te gusta, una mezcla de decisión personal y influencia de marketing? Tal vez seguir una tendencia es algo natural, al fin y al cabo, las personas son seres sociales, y el sentimiento de comunidad y comprensión se vuelve tan evidente en este tipo de comportamiento.

Un par de factores importantes son los acontecimientos sociopsicológicos, como el sentido de comunidad y el materialismo, ambos conceptos muy diferentes pero que se relacionan al analizar el pensamiento grupal e individual, pero antes que nada, veamos la duración de una tendencia, tomando información de la industria de la moda, las fases pueden identificarse con bastante claridad, posteriormente, se pueden abordar las causas raíz y las consecuencias.

Diantari, en el Journal of Aesthetics, Design, and Art Management, divide el proceso en las siguientes etapas: introducción, ascenso, auge, declive y obsolescencia. 

La introducción es la primera fase, y es una de las más fascinantes, ya que la forma en que las personas asumen nueva información y deciden qué comprar comienza a ocurrir desde el principio, el marketing y el comercio electrónico necesitan tener estrategias eficientes para salir de este primer momento de asombro,en este instante, las redes sociales se convierten en un fuerte foco en el intercambio, se iluminan tales estrategias para señalar a las personas que existe esta nueva mercancía y las cualidades y beneficios generales que podrían agregarle a la vida de alguien, también impulsa a los influencers, como los principales portavoces de su tendencia, especialmente en tiempos recientes, aunque el respaldo de celebridades ha sido práctica común, ahora más que nunca son los comunicadores principales.

Los medios contemporáneos tienen efectos en dos áreas opuestas simultáneamente, propagan información excesiva, no siempre confiable, y por lo tanto, también generan la demanda de contenido más auténtico, realista y sensato, impulsando figuras accesibles que comparten destellos de sus propias personalidades y valores, mostrando rutinas saturadas de mundanidad, reseñas de productos y recomendaciones sinceras, contenido con el que se pueda identificar y, lo más importante, alcanzable.

En este punto es donde se vuelve alarmante, uno de los aspectos más costosos del ciclo de tendencias es el sobreconsumo.

Alrededor de la segunda y tercera fase de la tendencia, el auge y el pico del producto o servicio en cuestión, es el escalón más caro en la escalera, después de que la estrategia de marketing funciona, los frutos del trabajo comienzan a florecer y la gente empieza a comprar lo que se les ha recomendado, con diversos resultados, el individuo podría pensar que lo que ha comprado tiene valor, mientras que otros podrían sentir que fue una compra ineficaz, sin embargo, desde el punto de vista de terceros, el marketing de influencers y el comercio electrónico en general, como los sitios de compras en línea, han demostrado estadísticamente contribuir a un consumo masivo, aspectos como la información engañosa, los precios bajos, transacciones efectivas y súper rápidas son solo un par de consecuencias negativas que conducen a efectos aún peores a nivel global. 

El gasto excesivo logra aumentar el desperdicio, inflige un impacto ambiental peligroso, el gasto impulsivo acelerado hace que las personas compren y luego no usen, los recursos naturales se agotan en algún momento, ahora más escasos que nunca. En este momento, ocurre el intercambio, se desarrolla la intención de compra y termina en acción, una actitud se convierte en una compra, estas intenciones, si se alinean en este entorno de redes sociales, terminan sintiéndose recíprocas, completando finalmente esta parte del proceso con éxito.

Las redes sociales son esenciales para comprender cómo se toman las decisiones respecto al consumo, las personas son influenciadas por otros en su red, como familiares y amigos, pero especialmente en línea. Además, los individuos se ven muy motivados por su realización personal, las personas quieren alcanzar metas, lograr hitos personales, sociales y profesionales, y el crecimiento personal en general, la promoción de bienes que logren esas cosas, incluso si sólo se perciben, es muy importante en el intercambio social que ocurre dentro de la red, históricamente, tener muchos bienes materiales era un signo de bienestar, y ahora, con la globalización de dichas redes, todo puede afirmarse según tus necesidades, especialmente, ya no es por supervivencia, aunque puede ajustarse de manera hiper-específica a tus gustos, creencias, cultura, estado económico, profesión, adaptándose a esos y muchos otros detalles de la vida de alguien, la sensación que el cerebro genera e intenta racionalizar es utilidad.

El concepto de utilidad da sentido a las decisiones tomadas en el ciclo de tendencias, si decides obtener algo material, el proceso comienza con impulsos como las preferencias personales mencionadas anteriormente y la motivación de los círculos sociales integrados con el marketing en línea, le otorgas la utilidad antes de comprarlo con la intención de que lo necesitarás o quizás simplemente para hacerte sentir pleno, y luego, respondes en consecuencia.

Después de esa respuesta inicial y desarrollo, todo comienza a desacelerarse, muchas personas han adquirido esto y las emociones temporales comienzan a asentarse, lo que sucede con una tendencia es que eventualmente se desvanecerá, hay muchas causas para esto, podría deberse a cambios sociales, disminución de la novedad, saturación del mercado, pérdida de exclusividad y lanzamientos más nuevos y mejorados, seguir a la masa disminuye la diversidad de personalidades y seres humanos que habitan la Tierra, existen tantas consecuencias negativas que provienen del consumo excesivo de tendencias, todos saben que afecta la biodiversidad y los recursos naturales, eso probablemente sea conocimiento común a estas alturas, pero hay una gran cantidad de otras dificultades significativas, estar siempre concentrado en la utilidad no es saludable para la práctica de permanecer en el momento y encontrar alegría más allá de lo material.

Esto conduce a ciertos efectos secundarios que es interesante señalar, fenómenos como el materialismo y el arrepentimiento del comprador. Por supuesto, esto está intrínsecamente relacionado con la experiencia personal, sin embargo, este tipo de ramificaciones existen y tienen un gran peso en la discusión.

El materialismo, (Koay et al., 2022) citado en (Hagerborn et al., 2024) “es la creencia de que tener o adquirir dinero y bienes materiales mejora el bienestar y la satisfacción de la persona y conduce a la felicidad y al éxito en la vida”. Uno de los aspectos más significativos del sobreconsumo, se ha identificado que ambos están estrechamente relacionados, el sobreconsumo y el materialismo borran las experiencias de vida significativas y la conexión social, actuando casi como un factor de aislamiento, incluso si es algo que puede ser muy significativo para la comodidad diaria, se convierte en una parte central de los sistemas de algunas personas, aprenden a valorar más lo tangible que otras facetas de la vida, se dejan influenciar fácilmente por las campañas modernas y la publicidad en redes sociales, caen en la trampa de la impulsividad y terminan dañando la Tierra y su propio crecimiento personal.

Esto también conduce al arrepentimiento del comprador, los materialistas o cualquier persona que participe en el comercio eventualmente tendrá que pasar por esta sensación de disconformidad, arrepentirse de una compra no es algo raro, pero se convierte en un problema mayor en comportamientos de consumo desequilibrados y compulsivos. 

Tales casos conducen a compras cada vez más caras y problemáticas, alimentando la idea de que realmente era innecesario participar en el proceso, revelando razones ocultas detrás de decisiones tan precipitadas, en psicología, se aborda a través del fenómeno denominado disonancia cognitiva, la persona sufre de ideas conflictivas subyacentes, lo que lleva a inversiones incómodas, caracterizadas por un arrepentimiento significativo posterior a la compra.

Los datos siguen sugiriendo que las personas generalmente no se preocupan por el consumo ético, esto se muestra en los estudios mencionados, donde en las muestras analizadas, valoraban mucho más la disponibilidad y el precio en comparación con cualquier otro factor relacionado con la sostenibilidad. Esto es una gran preocupación para el futuro, algunos estudios ya han comenzado a establecer marcos cercanos en proximidad, esperando tendencias que abarquen todos los desafíos globales, incluso si las personas no están listas o no les preocupa, aún es muy probable que estas tendencias se llevan a cabo, y la sostenibilidad, junto con la práctica ética, podrían seguir siendo ignoradas, incluso a lo largo de los ciclos esperados por venir.

Ahora, ¿cuáles son algunos de ellos? ¿qué significa esto para los estudiantes? Los jóvenes y su falta de conciencia sostenible, ¿qué pasará y qué tendrán que enfrentar eventualmente? Algunas áreas afectadas se enumeran como se ve en Higher Learning 2025, que ha compilado una lista que apunta a la educación, en el punto número ocho  llamado “El Nuevo Panorama de la Educación Superior”. 

Siendo la innovación un punto central, el cambio constante ahora es común, procesos más nuevos y optimizados están surgiendo en los planes de estudio modernos. Esto está estrechamente relacionado con el segundo aspecto, la capacidad financiera ahora está afectada, las altas demandas de progreso, automatización y avance tecnológico cuestan mucho y no todos los lugares están preparados para superar el impacto. Por supuesto, están los continuos y desconcertantes aumentos y caídas de la IA, y la implementación muy ansiosa y rápida de sus estructuras en la educación. Al llegar al final de la lista, los grados acumulables, la adquisición de credenciales de manera dinámica y rápida, se están volviendo más significativos, ser eficiente con el tiempo y superponer esfuerzos educativos para enriquecer el conocimiento se vuelve preferible, y finalmente, “El público y los empleadores están enfocándose en el aprendizaje basado en habilidades.” (Higher Learning, 2025).

También se está cuestionando el valor de la educación superior, su accesibilidad y el impacto a largo plazo de dicha inversión en cuanto al empleo y la asequibilidad, todas esas preguntas están surgiendo, destacando un llamado a una respuesta.

Entonces sí, hay muchos desafíos que afrontar, todos requieren conciencia, un análisis profundo del ciclo de las tendencias y sus costosos efectos posteriores, el consumo excesivo, ambos son dependientes e interconectados a través puntos de inflexión, ambos están luchando por encontrar estabilidad, una pelea entre las personas y su deliberada indiferencia hacia el daño ambiental, los problemas de la economía moderna, condiciones injustas, contaminación y calentamiento global, ciclos de tendencias arraigados en la cultura popular, contenido comercializado, inteligencia emocional, la subjetividad de la felicidad, equilibrio y realización, hay tantos actores involucrados, todos contribuyendo al fenómeno de las tendencias.

En conclusión, la percepción interna que cada persona tiene seguirá reflejándose de vuelta al mundo, la sociedad continúa estando fija entre entramados complejos, ahora más que nunca, el ritmo parece haberse acelerado, pero todavía se nutre de raíces antiguas, los picos de popularidad suben y bajan, la gente se reúne para gustar de algo y luego se separan de nuevo hacia la siguiente tendencia, una fibra que lo abarca todo y que vive continuamente, seguirá siendo así, y los investigadores continuarán diseccionando e intentando predecir para obtener mejores resultados con el fin de comprender un ciclo tan fascinante, esto sólo continuará si sigue siendo apoyada por personas interesadas en lo nuevo, lo fácil y lo rápido.

Referencias.

Diantari, Ni. (2021). Trend cycle analysis on fast fashion products. Journal of Aesthetics, Design, and Art Management. DOI:10.58982/jadam.v1i1.101

Hagerborn, Cecilia. Ivarsson, Isabella. & Linde, Samuel. (2024). Trending towards overconsumption: The role of social media in shaping Swedish Gen Z’s buying patterns. [Business administration Thesis] JÖNKÖPING University. https://www.diva-portal.org/smash/get/diva2:1865308/FULLTEXT01.pdf

HLC Higher Learning Commision. (2025). Trends 2025. https://download.hlcommission.org/HLCTrends_INF.pdf

Sibghatullah, S. Asghar, Z. (2023). Dynamics of social influence on consumption choices: A social network representation. https://doi.org/10.1016/j.heliyon.2023.e17146

Original English version: The cost of following trends.pdf